La regularización de inmuebles es un proceso legal destinado a garantizar la legalidad y seguridad jurídica de las propiedades, a través de la regularización de su situación legal y registral. Este proceso es fundamental para asegurar la propiedad de un inmueble, protegiendo los derechos de los propietarios y evitando conflictos legales en el futuro.
La regularización puede ser necesaria en casos de inmuebles irregulares, con problemas de escrituración, falta de registro o problemas de linderos, entre otros.